Noruega potencia sus fuerzas armadas con el misil de 400 kilos y lanza una advertencia contundente a futuros enemigos
El JSM mejora el rendimiento contra objetivos terrestres y marítimos, y puede transportarse como carga de arma interna en el F-35, por lo que no aumenta la cobertura del radar de la aeronave.
Noruega estrena misil. Se trata del JSM, el t Strike Missile es un misil de crucero avanzado desarrollado por Noruega (Kongsberg) y Estados Unidos, diseñado para aviones como el F-35. Tiene un alcance de más de 500 km, capacidad sigilosa y navegación por GPS/INS, además de guiado por imagen infrarroja.
Puede atacar objetivos terrestres y navales con alta precisión, incluso en entornos con defensas aéreas. Noruega es el primer país en desplegarlo operativamente en sus F-35A, mejorando su poder de disuasión. También lo han adquido países como Japón, Australia y Alemania para modernizar sus fuerzas armadas.
La noticia del nuevo misil (hecho en Noruega por Konsberg), llega justo cuando han recibido los 52 cazas Lockheed Martin F-35A a la base aérea noruega de Ørland, según ha contado Forsvarsmateriel, la versión noruega del Departamento de Logística de las Fuerzas de Defensa.
Para el general de brigada Jarle Nergård, director de capacidades de guerra aérea de la Dirección de Logística, “anteriormente, esta capacidad solo estaba disponible para las grandes potencias. Ahora que contamos con el F-35 y el JSM, el enemigo debe tener en cuenta que Noruega es capaz de atacar objetivos como buques de guerra, radares y puestos de mando desde largas distancias sin la ayuda de nuestros aliados”.
El compartimento de armas del F-35 puede acomodar este nuevo misil de combate aéreo JSM y otro misil de combate aéreo AIM-120 Amraam. El misil vuela a una altitud muy baja y es capaz de realizar fuertes movimientos durante la fase de adquisición del objetivo. Incluye sistemas de navegación GPS e inercial, un buscador de imágenes por infrarrojos y capacidad de reconocimiento automático de objetivos.
La principal ventaja es que no se detecta por los radares volando a esa baja altura. Además está optimizado para aviones de quinta generación, aprovecha los sistemas avanzados para misiones de ataque multifuncional. Su versatilidad hace que pueda impactar sobre blancos móviles en tierra y mar (como barcos), incluso sin GPS, usando guiado por imagen infrarroja. Esta nueva arma refuerza la capacidad de una fuerza aérea para proyectar poder y disuadir amenazas, como lo demuestra su adopción por aliados de la OTAN y Asia - Pacífico.
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