Elaboran un listado con comida internacional que “solo los ricos se pueden permitir” y tenemos sorpresa ibérica

En la era del exceso y la ostentación, no solo los autos, relojes o mansiones definen el estatus social. También lo hace lo que se sirve en la mesa. Desde cafés fermentados en el estómago de animales hasta sandías negras con precios de colección, un listado reciente ha recopilado los alimentos más exclusivos y caros del mundo. Y sí, uno de ellos tiene acento ibérico.

El ranking elaborado por el blog especializado Spatula Desserts revela un catálogo que mezcla rareza, tradición y excentricidad. Son alimentos que, en muchos casos, no están al alcance ni del gourmet medio, y cuyo consumo suele estar reservado a multimillonarios, celebridades o jefes de Estado.

Delicadezas oceánicas y montañas de oro

Entre los productos destacados, el caviar beluga ocupa un lugar emblemático. Considerado el más lujoso del mundo, se extrae de un esturión amenazado del Mar Caspio y puede alcanzar precios superiores a 5.000 euros el kilo.

También figura la langosta de Nueva Inglaterra, codiciada por su carne tierna. Aunque su prestigio ha sido cuestionado, su precio sigue intacto: más de 200 euros por pieza en los mejores restaurantes del mundo.

El café más caro del mundo viene del intestino de un animal

El Kopi Luwak, originario del sudeste asiático, es quizás el ejemplo más curioso. Los granos de café son ingeridos por civetas, fermentados en su sistema digestivo y luego recolectados. El resultado es una infusión suave, terrosa y sorprendentemente cara, hasta 600 dólares por menos de medio kilo.

Sin embargo, esta producción ha generado controversia por la explotación animal en criaderos no regulados. Diversas ONG piden mayor transparencia en la industria.

Un hongo más valioso que el oro

El matsutake japonés, un hongo silvestre que crece en bosques específicos de Asia, puede costar más de 2.000 euros el kilo. Su aroma especiado y su escasez lo convierten en una obsesión entre chefs con estrella Michelin.

Jamón ibérico: el representante español del lujo gastronómico

Entre tanta rareza importada, hay también un orgullo ibérico en la lista. El jamón ibérico de bellota, especialmente el de la denominación de origen Jabugo, figura como uno de los productos más apreciados y caros del mundo.

Criado en libertad y alimentado exclusivamente con bellotas, este jamón puede superar los 4.000 euros por pieza.

Patatas, sandías y lechuga de élite

No todos los artículos en el listado son carnes o mariscos. Algunas sorpresas incluyen:

• La Bonnotte, una patata sa cultivada en la isla de Noirmoutier, que alcanza los 500 euros el kilo. Su cosecha manual y limitada explica su precio.
• Sandía Densuke, originaria de Hokkaido (Japón), con su piel negra brillante y escasa cantidad de semillas. Las primeras del año pueden subastarse por más de 6.000 euros.
• Lechuga rosa, una variedad ornamental que ha ganado fama por su estética en redes sociales, pero cuyo sabor no supera al de la tradicional. Aun así, su precio es diez veces mayor que una lechuga común.

La dulce extravagancia turca: miel de cueva

Desde Turquía llega otro de los productos más inusuales: la “miel élfica” (Anzer Balı), recolectada a más de 1.800 metros de profundidad en cuevas de la provincia de Artvin. Su producción es tan limitada que un solo kilo puede alcanzar los 10.000 dólares. Su sabor, mineral y floral, es altamente valorado en la medicina tradicional turca.

Aunque muchos de estos alimentos tienen razones históricas o geográficas que justifican su coste, otros parecen inflados por tendencias y marketing.

Este listado no es solo un catálogo de precios elevados. También es un reflejo de cómo la gastronomía puede volverse símbolo de poder, estatus y diferenciación social.

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