Les cancelan el vuelo a España, la aerolínea les pide ir al aeropuerto todas las mañanas y todo acaba en indemnización de 2.546 euros
Facua denuncia que la aerolínea incumplió sus obligaciones básicas y dejó a la familia sin asistencia durante varios días.
Una familia de Valencia ha sido indemnizada con 2.546 euros por la aerolínea Ryanair después de que su vuelo de regreso desde Francia fuera cancelado sin ofrecer una alternativa adecuada, según ha informado la organización de consumidores Facua-Consumidores en Acción.
El incidente se produjo el 30 de junio de 2022, cuando el vuelo que debía traer de vuelta a España a una pareja y sus dos hijos fue cancelado. Según Facua, los representantes de Ryanair en el aeropuerto les indicaron que debían presentarse cada mañana por si aparecían plazas libres en otro vuelo, pero no se les ofreció alojamiento ni transporte, como exige la normativa europea.
El Reglamento (CE) 261/2004 del Parlamento Europeo y del Consejo establece que en caso de cancelación de un vuelo, la aerolínea debe ofrecer comida, bebida, alojamiento en hotel cuando sea necesario, transporte entre el aeropuerto y el lugar de alojamiento, y reembolso o transporte alternativo al destino final.
2.546 euros tras intervención de autoridades
Ante la falta de respuesta de la aerolínea a las reclamaciones iniciales, Facua denunció los hechos ante la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), que remitió el caso a la Dirección de Aviación Civil de Francia por haberse producido el incidente en su territorio.
Tras la apertura de la investigación, Ryanair accedió a indemnizar a la familia con 2.546 euros: 1.546 euros correspondientes al reembolso de los billetes alternativos y otros gastos, y 1.000 euros adicionales en concepto de compensación por la cancelación (250 euros por pasajero, según marca la normativa para vuelos de menos de 1.500 kilómetros).
La compensación económica corresponde a lo estipulado en el artículo 7 del Reglamento (CE) 261/2004, que establece que los pasajeros tienen derecho a una indemnización de 250 euros en caso de cancelación de vuelos de corta distancia, salvo si se les ha informado con antelación suficiente o se les ofrece una alternativa razonable sin gran retraso.
Facua ha recordado que Ryanair, como cualquier compañía que opere vuelos dentro de la Unión Europea, está obligada a cumplir esta normativa y que, en caso de cancelación, los pasajeros no deben ser abandonados a su suerte. La organización ha instado a los afectados por situaciones similares a reclamar sus derechos.
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