Renuncia a su trabajo de 41.000 euros por no poder justificar 4 minutos de inactividad: “No pude soportarlo más”
La mujer se defendió ante el tribunal asegurando que se “olvidó de cerrar el correo electrónico” antes de ir a tomar un descanso.
Un tribunal irlandés ha desestimado la petición de despido constructivo presentada por una trabajadora de eBay que renunció a su puesto de trabajo tras ser amonestada por estar inactiva cuatro minutos durante su jornada de trabajo, informa Irish Independent.
La empleada, con una antigüedad de casi siete años en la compañía, dimitió el 5 de marzo del año pasado tras serle comunicado que un funcionario de apelaciones de la compañía había redactado una advertencia escrita contra ella por “evitar trabajar”.
De acuerdo con la amonestación presentada, la gerente atestiguó el jueves 21 de diciembre de 2024 como la mujer había conseguido cerrar una incidencia con un cliente en un minuto y treinta y tres segundos, pero había mantenido la página abierta durante unos cuantos minutos más.
“[Para] el tiempo de inactividad en un correo electrónico, cualquier valor superior a 60 segundos se considera evasión de trabajo”, aseguró la gerente.
Según la empleada, tanto la amonestación por los cuatro minutos de inactividad como el “asesoramiento verbal” al que se vio obligada a someterse en noviembre de 2023 tras llegar tarde de forma reiterada se debía a que ella había presentado dos quejas contra dos gerentes de operaciones poco tiempo antes.
La mujer se defendió ante el tribunal asegurando que se “olvidó de cerrar el correo electrónico” antes de ir a tomar un descanso, y aclaró que las ocho veces que había llegado tarde a su puesto de trabajo se debía a que tenía problemas con el coche y el autobús no llegó a tiempo. “Eso estaba fuera de mi control, no pude ir a trabajar”, sostuvo.
Una decisión radical
Si bien el juez aseguró comprender las motivaciones de sus acciones, le preguntó a la empleada por qué decidió dimitir de un empleo de 41.000 euros anuales antes que defender su postura, a lo que ella aclaró que no pudo “soportarlo más”.
Así mismo, la mujer utilizó la expresión “gente muriendo por todas partes” frente a la Comisión de Relaciones Laborales (WRC, por sus siglas en ingles) para hacer referencia a que estaba afrontando la pérdida de varios seres queridos, y no supo cómo actuar.
Tras revisar el caso completo, el tribunal dictaminó que, si bien los hechos se habían desarrollado en condiciones desfavorables para la mujer, no podían otorgarle el despido constructivo, al considerar que abandonar su puesto de trabajo no era su única opción.
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