Marlen Reusser, del Movistar, conquista Picón Blanco y se viste de líder

La suiza Marlen Reusser, del equipo Movistar, hizo una auténtica demostración en la subida al temido Picón Blanco, fin de la tercera etapa de la Vuelta a Burgos que partió en Soncillo, para dejar sentenciada la ronda. La corredora helvética firmó una actuación imponente en la subida final, logrando la victoria en solitario y enfundándose el maillot morado de líder tras dejar atrás a todas sus rivales con una fuerza demoledora.

Segunda fue le neerlandesa Yara Kastelijn (Fenix Deceuninck) con 40 segundos de desventaja y tercera, a 1:17, la italiana Elisa Longo Borghini (UAE). La jornada arrancó con los primeros movimientos en la localidad de Santelices, donde Lily Williams (Human Powered Health) protagonizó un primer intento de fuga, al que se unieron Morgane Coston (Roland), Kiara Lylyk (Winspace), Ariana Gilabert (Eneicat) y Marta Pavesi (Fassa Bartolo).

Sin embargo, el pelotón no dejó hacer y en apenas cinco kilómetros neutralizó el intento. En el primer puerto puntuable del día, Clara Copponi (Lidl-Trek) cruzó en cabeza, seguida de Marie Schreiber (SD Worx), Jelena Eric y la local Sara Martín, ambas del Movistar Team, y con el pelotón compacto, los equipos luchaban por hacerse con el liderato de la montaña, que hasta ese momento tenía en su poder Coston.

En el Alto Retuerta, Lotte Kopecky (SD Worx) se impuso por delante de Copponi, mientras que Brodie Chapman (UAE) y Eric completaron los puntos. Ya en Brizuela, se consolidó una nueva escapada con ciclistas de calidad como Alison Jackson (EF Education), Catalina Soto (Laboral Kutxa), Alicia González (St Michel), Anastasiya Kolesava (Canyon), Paula Blasi (UAE), Annemarie Worst (Fenix-Deceuninck) y Silvia Zanardi (Human Powered), que lograron una renta cercana a los dos minutos, pero en la ascensión al Alto de Bocos el pelotón aceleró el ritmo, obligando a reducir diferencias.

Coronó en primer lugar Kolesava, seguida por Blasi, Jackson y Soto, pero la bajada hacia Espinosa de los Monteros volvió a compactar al pelotón. Fue en ese punto donde el Movistar comenzó a tomar posiciones estratégicas con la vista puesta en la decisiva subida final al Picón Blanco.

Ya en las primeras rampas del Picón Blanco, la colombiana Paula Patiño marcó el paso para su líder, acompañada por un grupo selecto de 18 corredoras entre las que se encontraba la hasta entonces líder, Mie Ottestad. Elise Chabbey (FDJ) asumió el relevo, imprimiendo un ritmo sostenido que hizo ceder a varias favoritas.

Fue entonces cuando Marlen Reusser decidió atacar y su fuerte ritmo fue fulminante, pues solo Yara Kastelijn (Fenix-Deceuninck) y Juliette Labous (DSM-Firmenich) lograron seguirla brevemente, aunque la sa acabó descolgada pronto, igual que por detrás quedaron nombres como Lotte Kopecky y la propia líder Ottestad.

La lucha por la etapa se redujo a un duelo entre Reusser y Kastelijn, pero la suiza mostraba mejores piernas, y a falta de dos kilómetros para la meta, Reusser se marchó en solitario, aumentando rápidamente la ventaja y cruzó la línea de meta con 40 segundos sobre Kastelijn y 1:17 sobre Elisa Longo Borghini (UAE), firmando una victoria autoritaria.

Con esta actuación, Reusser no solo se adjudica la etapa reina, sino que también se convierte en la nueva líder de la General en la Vuelta a Burgos, dejando muy de cara su victoria final tras la contrarreloj de mañana. Con un tiempo total de 9h12:49 aventaja en 1:10 a Kastelijn, en 1:43 a Elisa Longo Borghini, en 1:58 a Amanda Spratt (Lidl Trek) y en 2:01 a Elise Chabbey (FDJ), mientras que Mireia Benito (AG Insurance) es décima a 3:21.

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