Divorcio entre la afición mallorquinista y los jugadores en la despedida de la temporada en Son Moix
Morlanes: “Nunca he vivido que se increpe a un compañero durante el partido”.
La temporada en Son Moix ha acabado fatal.
Hace un año, con motivo de la final de Copa, y la relación en los últimos años desde el regreso de Segunda B a Primera, había generado una comunión espectacular entre el seguidor mallorquinista y su equipo, pero en la derrota ante el Getafe, dilapidando las opciones europeas, han reventado una relación que era ejemplar.
Cánticos como “¡¡¡estamos de vacaciones!!! como insultos a jugadores determinados, han roto una relación que era ejemplar.
En plena lucha por entrar en Europa, el Mallorca ha perdido cuatro de los últimos cinco partidos en el momento clave de la temporada y la afición bermellona apela a la apatía una vez logrado el objetivo del club, la permanencia.
Los mencionados cánticos, el enfrentamiento con Pablo Maffeo o el gesto de Larin tras marcar el gol y pidiendo silencio a la grada, han alterado a la parroquia mallorquinista.
El entrenador, Jagoba Arrasate habla del peligro que supondría “entrar en autodestrucción”, y el centrocampista Manu Morlanes, muy criticado en las redes por sus declaraciones ha manifestado lo siguiente ante las cámaras de Dazn: “ha habido mucha gente que ha venido a animar al equipo y ver lo que ha sucedido hoy, me da mucha pena”, incidiendo especialmente en el conflicto de Maffeo con la grada: “nunca he vivido que se increpe a un compañero durante el partido, no podemos sentir esa crispación porque se nos contagia”.
Ya ante el micrófono del club, el jugador ha añadido que “era un día para volver a enganchar a toda esa gente que hemos sentido que se había bajado del carro”. Según Morlanes “han increpado a Maffeo y eso no ayuda”.
Por su parte, Cyle Larin mandó callar a la afición a la hora de celebrar su gol, el que acortaba diferencias en el marcado para finalmente acabar el partido con derrota por 1-2.
Hace unas fechas, las diferencias ya empezaron cuando un grupo de seguidores desplazados a Girona se enfrentaron, tras la derrota del equipo, al centrocampista Dani Rodríguez.
Algo se ha roto entre la afición bermellona y los jugadores. El mallorquinismo, ilusionado con volver a Europa 21 años después, acusa al equipo de conformista una vez lograda matemáticamente la permanencia.
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí
Rellene su nombre y apellidos para comentar
Tu opinión se publicará con nombres y apellidos