Los 10 Balones de Oro que nunca ganaron la Champions
Muchos jugadores que ocupan un lugar destacado en la historia del fútbol no han podido levantar nunca la ‘Orejona’. Ronaldo o Baggio, entre ellos.
A lo largo de la historia del fútbol, hay dos títulos que definen la grandeza individual y colectiva de un jugador: el Balón de Oro y la Champions League. El primero reconoce al mejor futbolista del mundo en una temporada; el segundo, al mejor equipo de Europa. Sin embargo, no siempre estos caminos se cruzan. Existen jugadores que alcanzaron la cima individual del fútbol sin haber conquistado jamás la mítica Orejona.
Y es que en un deporte tan colectivo como el fútbol, muchos de los mejores talentos de todos los tiempos han visto frustrado su sueño europeo pese a ser considerados los más destacados de su generación. A veces por mala suerte, otras por contextos de equipo o lesiones.
Ronaldo Nazario
El delantero brasileño ganó el Balón de Oro en 1997 y 2002 y es recordado como uno de los atacantes más talentosos de la historia. Sin embargo, las lesiones y las circunstancias de sus equipos le impidieron ganar la Champions.
En el Inter, nunca llegó a pasar de cuartos de la máxima competición intercontinental. Por su parte, en el Madrid, a pesar de formar parte de una plantilla repleta de estrellas, el equipo cayó en semifinales en su temporada más prometedora, la 2002-03. Fue precísamente en esa edición donde protagonizó una de las actuaciones más recordadas del torneo: su hat-trick histórico en Old Trafford ante el Manchester United.
En enero de 2007, Ronaldo fue transferido al Milan tras haber marcado más de 100 goles con el club español. Sin embargo, ya había disputado algunos partidos de la Champions League esa misma temporada con los merengues, lo que, según la normativa de la UEFA, le impedía jugar ese torneo con otro equipo en la misma campaña.
Esta regla dejó fuera al astro brasileño de la Champions con el Milan, frustrando las expectativas del club italiano, que lo había fichado para reforzar su plantilla bajo la dirección de Carlo Ancelotti.
Omar Sívori
Omar Sívori dejó una huella imborrable en la historia de la Juventus durante la década de los 60, a pesar de que el título de la Champions League fuese el gran ausente en su brillante trayectoria. La oportunidad más cercana llegó en la temporada 1961-62, cuando la Vecchia Signora alcanzó los cuartos de final, pero cayó ante el Real Madrid.
Sívori deslumbraba con su zurda y su forma de jugar tan provocadora como efectiva, que lo convirtió en un verdadero tormento para los defensores. Así, formó un trío legendario junto a Boniperti y Charles, y en 1961 fue galardonado con el Balón de Oro, siendo el segundo argentino, después de Di Stéfano (ya con ciudadanía italiana) en obtenerlo.
Oleg Blokhin
El atacante ucraniano marcó un antes y un después en el fútbol soviético al convertirse en el primer jugador de la URSS en ser reconocido como el mejor del mundo, al ganar el Balón de Oro en 1975. Su velocidad explosiva y habilidad técnica lo hicieron destacar de forma contundente en aquella edición, superando a figuras legendarias como Beckenbauer o Cruyff.
Y es que durante los años 70 y 80, su club, el Dinamo de Kiev, dominó el fútbol en la Unión Soviética y logró importantes éxitos internacionales, como dos títulos de la Recopa de Europa. Sin embargo, nunca logró trasladar ese dominio a la Copa de Europa (actual Champions League), donde su momento más prometedor fue en 1977, cuando fueron eliminados por el Borussia Mönchengladbach en semifinales.
Allan Simonsen
Allan Simonsen, apodado ‘Simonet’, ostenta un lugar único en la historia del fútbol danés como el único jugador de su país en recibir el Balón de Oro, galardón que obtuvo en 1977. Aquel año brilló con el Borussia Mönchengladbach, llevando al equipo a conquistar la Bundesliga y a disputar la final de la Copa de Europa, donde cayeron por la mínima ante el Liverpool de Kevin Keegan en Roma.
Pequeño en estatura pero inmenso en talento, Simonsen fue una pieza clave en el ataque del equipo alemán, con el que también ganó dos Copas de la UEFA. Más tarde, continuó su carrera en el FC Barcelona, donde se coronó campeón de la Recopa de Europa, pero nunca de la Champions.
Roberto Baggio
Roberto Baggio aterrizó en la Juventus en 1990 como la gran esperanza para devolver al club a la cima, tras haber sido figura en la Fiorentina. Su fichaje buscaba romper con la hegemonía del Milan de Arrigo Sacchi en Italia y posicionar a los bianconeri como protagonistas en el panorama europeo. Sin embargo, durante su etapa en Turín, la Juve ni siquiera logró clasificarse para disputar la Copa de Europa.
Curiosamente, Baggio dejó la Juventus justo antes de que el club conquistara su segunda Champions League en 1996. Su posterior paso por los equipos milaneses tampoco le ofrecieron grandes oportunidades, ya que atravesaban una etapa de transición lejos de su mejor nivel competitivo. Así, pese a su genio innegable y su Balón de Oro en 1993, la Copa de Europa se mantuvo fuera de su alcance.
George Weah
George Weah, ganador del Balón de Oro en 1995, es uno de los grandes nombres que coronan esta lista. El delantero tuvo una gran irrupción Europa, especialmente durante su etapa en el PSG, con el que estuvo muy cerca de alcanzar la final de la máxima competición intercontinental. Sin embargo, el Milan frustró sus aspiraciones en la semifinal de 1995.
Ese mismo año, el destino lo llevó precisamente al equipo italiano que lo había dejado fuera del torneo. Sin embargo, su paso por el Milan no le permitió redimirse en Europa, ya que el club atravesaba un periodo de bajo rendimiento en competiciones continentales. Así, pese a su enorme talento y a ser el primer africano en recibir el Balón de Oro, la Champions quedó como la gran deuda en una carrera.
Lothar Matthäus
Lothar Matthäus, uno de los grandes referentes del fútbol alemán, disfrutó de una carrera repleta de logros tanto con el Bayern Múnich como con la selección nacional, incluyendo una Copa del Mundo en 1990 y el Balón de Oro ese mismo año. Sin embargo, a pesar de sus múltiples conquistas, el trofeo más codiciado a nivel de clubes, la Champions League, se le escapó.
A lo largo de su trayectoria disputó tres finales de la competición, pero nunca logró levantar la Orejona. La más recordada fue la de 1999, cuando el Bayern parecía tener el título asegurado hasta que el Manchester United protagonizó una remontada inolvidable en el tiempo añadido de una final que acabó 2-1 a favor de los ingleses.
Michael Owen
El ganador del Balón de Oro en 2001 fue uno de los delanteros más letales de su generación, conocido por su velocidad fulminante y su instinto goleador. Brilló especialmente en sus años con el Liverpool, donde conquistó un triplete histórico en 2001 (FA Cup, Copa de la Liga y Copa de la UEFA), pero la Champions League siempre se le resistió. Ni en su etapa en Anfield ni más tarde con el Real Madrid, donde coincidió con los ‘Galácticos’ logró acercarse verdaderamente a ganar el máximo título europeo.
Pavel Nedved
Pavel Nedved fue uno de los centrocampistas más destacados de la historia del fútbol. En 2003, alcanzó la cima individual del fútbol al ganar el Balón de Oro, superando a figuras como Thierry Henry y Paolo Maldini.
Un reconocimiento que coronó su espectacular año con la Juventus, donde su liderazgo y talento fueron clave para llevar al equipo a la final de la Champions. Sin embargo, a pesar de su destacada carrera y de haber estado muy cerca, nunca logró conquistar la máxima competición intercontinental.
Fabio Cannavaro
Sin duda, el mayor éxito de Fabio Cannavaro lo logró con la selección italiana. Fue el capitán que lideró a Italia hacia la conquista del Mundial de 2006 en Alemania, una actuación que le valió el Balón de Oro ese mismo año. Su solidez defensiva, liderazgo y temple lo convirtieron en uno de los pocos defensas en la historia que ha conseguido ese prestigioso galardón individual.
Sin embargo, a nivel de clubes, su palmarés es bastante más modesto si lo comparamos con otros ganadores del Balón de Oro. Pese a haber pasado por equipos de primer nivel como el Inter de Milán, la Juventus y el Real Madrid, Cannavaro nunca logró dejar una huella profunda en la Champions League.
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí
Rellene su nombre y apellidos para comentar
Tu opinión se publicará con nombres y apellidos