La obsesión defensiva del Betis

El Betis sigue preparando a puerta cerrada la final de la Conference antes de partir este lunes rumbo a Breslavia para quedar concentrado hasta la cita del miércoles contra el Chelsea. Y Pellegrini, en esa especie de laboratorio oculto en que se ha convertido la Ciudad Deportiva del Betis trabaja en la fórmula para volver a recuperar una solidez defensiva que ha brillado por su ausencia en las últimas citas. Una seguridad que se considera clave para alzar el primer título europeo de la entidad.

Porque el Betis lleva once partidos consecutivos encajando al menos un gol. La última vez que logró dejar su portería a cero fue en la propia Conference, en la eliminatoria de ida de los cuartos de final ante el débil Jagiellonia polaco. 2-0 ganó el Betis aquel día y Fran Vieites se marchó imbatido. Desde entonces, todos los equipos, hasta el defenestrado colista Valladolid, han marcado al menos un gol al Betis.

Cole Palmer es el jugador más peligroso del Chelsea y en el Betis lo saben de sobra. Y aunque no se trabaje solo en su defensa, se tiene muy en cuenta. “A Palmer se le para como a cualquier otro de los grandes jugadores a los que nos hemos enfrentado. Tenemos que estar muy juntitos sin balón y con balón, hacer que sufran. No nos podemos centrar solo en Palmer porque descuidaríamos a los otros grandes jugadores que tienen”, reconocía Sergi Altimira.

Y es que el trabajo defensivo es un mensaje recurrente en el vestuario del Betis, como apostillaba Bartra: “El Chelsea es un equipo muy completo y tienen mucho nivel físico y de intensidad. Sabemos que va a requerir de dar nuestra mejor versión defensiva. Llevamos mucho tiempo jugando los partidos como finales”.

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