La resilencia de Sergio Pellicer
El punto sumado en Eibar y las derrotas de Eldense y Zaragoza han dado aire a Sergio Pellicer, que cuenta con el respaldo de Loren Juarros. Dos finales más en La Rosaleda ante Castellón y Granada. Rafa, grata revelación.


La jornada ha dado un respiro a Sergio Pellicer, cuya continuidad había sido puesta en entredicho por una racha de tres derrotas consecutivas, cuatro puntos de 21 posibles y las alargadas sombras de Eldense y Zaragoza metiendo miedo en la línea de flotación del Málaga. En estas horas complicadas Loren Juarros, director deportivo ha mantenido su apoyo al entrenador.
El equipo logró en Eibar un ‘empate de cuatro puntos’. La igualada en Eibar y las derrotas de sus rivales directos en la lucha por eludir el descenso han devuelto algo de optimismo al entorno blanquiazul. El equipo pasa por un momento tan delicado que la continuidad de Sergio Pellicer fue puesta a debate en caso de derrota en Ipurua.

Es evidente que los blanquiazules respiraron muy hondo con la derrota del Eldense, frontera del descenso ante un Racing de Ferrol al borde de sellar su pérdida de categoría. También serenó los ánimos la derrota del otro competidor en la zona peligrosa, el Zaragoza, en Valencia ante el Levante. Eso dio una bala más ante el Eibar, en un momento crítico.
La dirección deportiva capitaneada por Loren Juarros no tenía planeado un cambio de entrenador en caso de derrota en territorio armero, aunque si es verdad que los dos siguientes partidos consecutivos en La Rosaleda contra Castellón y Granada sí podrían ser considerados como ‘match-balls’ Son jornadas muy decisivas.

Frases enigmáticas
Sergio Pellicer ha vivido de todo desde que asumió hace cinco años el banquillo del Málaga en un momento complicado y aceptó el reto de reconducir la nave en una segunda etapa volcánica con descenso a Primer RFEF y agónico regreso a Segunda. En esta etapa ha tenido que coexistir con la realidad de que el club no ha echado el resto con los refuerzos porque apostó por la base del ascenso y no fichó en el mercado de invierno.
Hace tiempo que el preparador malaguista deja frases enigmáticas. “Cada día que pasa es uno menos que me queda para ser el entrenador del Málaga” es uno de sus clásicos más repetidos. En la rueda de prensa previa al duelo contra los eibarreres dijo: “Estoy preparado para todo”. Es como si dejase entender que todo puede romperse en cualquier momento. Tiene contrato con el Málaga hasta 2026.

Y tras el punto obtenido en tierras donostiarras dejó una declaración que, cuanto menos, da que pensar. “·Aquí lo importante es el colectivo. Tenemos un partido el domingo, dos en casa, que son fundamentales. Con el calor de nuestra gente, estando todos juntos, con unión. Lo individual queda a un lado. Esté yo o no, que el equipo consiga el objetivo. Eso es lo más importante de todo”.
Ese “esté yo o no” es lo que da pensar. Y eso, tras un duelo donde el Málaga mantuvo a flote su distancia con la zona caliente con la plantilla que tiene, no reforzada cuando debió hacerlo y debilitada por las lesiones. Ramón, Haitam, Dani Lorenzo, Luismi y Aarón Ochoa.

En Eibar no tuvo reparos en apostar por de nuevo por canteranos. Diego Murillo, Dani Sánchez, David Larrubia, Antoñito Cordero, Chupete y Rafa, además de Dioni (se forjó en sus escalafones inferiores). Rafa, centrocampista de calidad, había tenido unos minutos en Oviedo. Salió en Eibar y no se arrugó, Marcó un gol de antología. Además, en el banquillo estaban Carlos López, Kevin e Izan. Mucho mérito el de Sergio Pellicer que sigue mostrando resilencia.
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