RFEF | Albert Luque

Albert Luque: “A Jenni Hermoso se le hizo la bola muy grande”

El exdirector deportivo de la RFEF explica su versión de los hechos sobre lo ocurrido con Jenni Hermoso en Ibiza: “Si hubiera sido Aitana no hubiera aparecido”.

Albert Luque llega a la Audiencia Nacional.
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El exdirector deportivo de la RFEF, Albert Luque, ha estado en El Larguero tras salir absuelto del delito de coacciones a Jenni Hermoso a raíz del beso de Luis Rubiales, expresidente de la Federación, a la futbolista. Un juicio que la Fiscalía ha pedido repetir. Ahora ha aprovechado la entrevista para dar su versión sobre cómo fue el trato con la jugadora durante el viaje a Ibiza y el proceso del juicio, además de otros temas de la Selección.

La Fiscalía ha pedido repetir el juicio: “Pensaba que ya podía pasar página, pero parece que no va a acabar aquí la cosa. Me hubiera gustado que se acabara y volver a pensar solo en el fútbol. Espero que no se alargue mucho más, pero no tiene pinta”.

Relación con Jenni Hermoso: “Me han preguntado si actuaría igual si volviera atrás. Después de lo ocurrido uno a lo mejor se lo pensaba dos veces, pero a nivel personal haría lo mismo. Lo que me sorprendió es que no me reciba. Ahí no iba como director de la Selección y no me había mandado nadie. Había involucrados dos amigos y fui a ver si yo podía ayudar en algo. No iba a decirle lo que tenía que hacer. Iba a que supiera que dentro de la Federación tenía un amigo. Se lo intenté explicar a su amiga, acabó la conversación y me fui”.

Acusaciones: “Me sorprendió la acusación del delito de coacciones. La amistad con Jenni viene de muchísimas cosas. Jenni ha tenido mi gestor de toda la vida en Terrassa para gestionar sus cosas. La he mandado a Iberdola, a los Ayuntamientos para charlas de fútbol femenino. Lo que hace un amigo. Tenía galas y se supo que un vestido que le encantaba era de un amigo mío y la ayudé. Cosas que fuera del fútbol no se hacen si no tienes esa amistad. Si no hubiera ese grado de amistad no hubiera interferido. Por ejemplo, si hubiera sido Aitana, no hubiera aparecido. Yo era el director de la masculina, no de la femenina. En delitos de coacciones tiene que haber intercambio de palabras y yo jamás la vi”.

Por qué cambia de actitud Jenni con él: “Me dijo: ‘Entiendo que vengas de buenas, pero no quiero hablar con nadie’. Yo creo que alguien influyó negativamente en Jenni Hermoso. Creo que es la persona que más daño me ha hecho en la vida. Jenni no es mala persona. Lo que he conocido de ella, antes de que se montara todo esto, me demostró que es buena persona. No es una persona, es una marabunta muy grande que incluso a ella se le escapa”.

¿Volvió a hablar con Jenni?: “No he vuelto a hablar con ella. Con la magnitud que cogió todo no puede haber o porque puede haber malentendidos y no he hablado nunca más con ella. Son momentos que los pasas a nivel individual. Pero en este último problema que he tenido han entrado padres, mujer, hijos, hermana, familiares que han sufrido mucho. Que a uno le hagan daño a nivel propio duele, pero a las personas que más quieres es difícil de perdonar. Si en un futuro me encontrara dos amigos volvería a intentar hablar con los dos, a ver si se arreglan. A nivel mediático la bola es tan grande que es difícil. A nivel personal dos personas que no son conocidas sería más fácil”.

Si se vuelve a encontrar con ella: “No soy una persona rencorosa, iría a hablar con ella. El rencor no lleva a ningún lado y yo tengo la conciencia tranquila. Hay noches que no he dormido viendo cómo sufren mis seres queridos. Eso es lo que más me ha dolido. Yo hacía años que no lloraba y la última vez que he llorado es en la sentencia de este juez porque sabía lo que le quitaba de encima a mis seres queridos. Mis hijos son pequeños y cuando sale que te piden cárcel te preguntan si puedes ir. Yo les decía que no, que el abogado me dijo que no. Pero en el colegio les preguntan a ellos... Es un tema muy mediático y veía que ellos estaban preocupados. Es como una bola que tiene uno dentro y al final se la saca”.

Sentencia: “Estaba yendo al colegio para ir a por mis hijos. Y cuando salen les pongo en una esquina, les doy un abrazo y se lo digo. Llamé a mi padre y a mi mujer. ‘Me alegro mucho por ti papá, porque eres bueno’, me dijeron mis hijos. ¿La petición de la Fiscalía? Podría haber dicho que con esto que ha salido no iba a dar la entrevista, pero he pensado ¿por qué me tengo que esconder? El día de la sentencia no podía coger una llamada porque se cortaban. Era constante. Hasta que no salió la absolución los mensajes fueron contados, pero me alegro. A nivel deportivo, cuando se toma la decisión de poner a De la Fuente nos mató todo el mundo y el tiempo nos ha dado la razón. Y a nivel de juicio hay un juez que nos ha dado la razón. Tener la conciencia tranquila no tiene precio. Yo sé lo que he hecho, porque le dije a Ana Cube que Jenni me tenía para lo que quisiera y por eso nos intercambiamos el teléfono. El primer mensaje que ella me manda es para luego tomar un café en Madrid, y eso es porque yo no he sido tan malo. Y luego yo soy de sangre caliente y tenía que haber hecho esa respuesta más pausada y me arrepiento de eso”.

Peor momento que ha pasado: “Al final es un diario, porque lo mediático ha sido fuera de lo común, muy grande. La llegada al juicio eran momentos muy difíciles. Al principio estuve nervioso, pero expliqué lo que había ocurrido”.

Cómo vio lo que hizo la RFEF con Jenni: “Voy a ir más atrás. Cuando Luis Rubiales llega a la Federación la Selección femenina era un cuerpo técnico de Vilda, dos amigos más y no tenían apenas profesionales. Y Rubiales dice que hay que hacer un apartado profesional como el masculino. Pero en la vida todo tiene que ser paulatino. Se llega a ser campeones del mundo con una previa muy difícil con renuncias de jugadoras que dicen que no quieren a Vilda. En el fútbol masculino eso es impensable, que nos podamos reunir los jugadores y digamos que no queremos al entrenador. Y al final fueron campeones del mundo con Vilda. ¿El beso? Estoy en mi casa y veo el beso. Y me sorprendo porque conozco a Rubiales. Para mí es un grandísimo presidente para la RFEF. Es una persona que se inventó el tema de la Supercopa. El beso es un gesto que no me gustó, no debe hacerlo un presidente lo que hizo en el palco. Pero el presidente se fue desde el primer día a Sídney y estuvo con ellas 24 horas en el hotel. Al final Jenni era una de las capitanas y hubo mucha relación porque hablaban todos los días. Fue un momento de efusividad. No me voy a poner a juzgar. Fue una reacción que no debe hacerla un presidente. Pero no es un beso que viene de la nada. Fue una chica que falló un penalti en esa final y crearon un vínculo que llevó a eso”.

Condena a Rubiales: “Son mundos que no controlo. Hay que respetar la opinión del juez”.

Si hubo presiones en la Federación: “Rubiales y el resto siguen convencidos de que no hubo. Yo creo que no hubo. ¿A Jenni? Ella creo que no quería hablar, quería dejar de un lado todo y disfrutar del título y es lo que dijo ella. Creo que la bola se le hace muy grande y aunque quieras pararla va cuesta abajo. No sé lo que pensaba Jenni, pero si hubiera querido echar marcha atrás no hubiera podido”.

Críticas a la sentencia de compañeras de Jenni Hermoso: “Si van como grupo, si la sentencia hubiera sido más favorable hacia Jenni hubieran dicho hay justicia y si es la que ha habido es normal que no estén contentos con la sentencia. Igual que si hubiera sido al revés mi familia habría dicho que es injusto”.

Apoyo de De la Fuente: “Es meterlo en camisa de once varas. Con él hemos tenido trabajos de estar mucho tiempo juntos. Me ha hecho muy participativo de que le diera mi opinión. Hemos tenido enganchones fuertes, incluso hemos estado a punto de encararnos, pero así son los matrimonios. Volvería a ponerlo. Los problemas lo arreglábamos de puertas para dentro. No quiero que me apoye públicamente porque no es su cometido y entiendo que no diga nada”.

Si mantendría su cargo si no hubiera estado en Ibiza: “No, porque hay personas muy válidas y solo porque las trajo Rubiales no están. Si me dijeran que tengo que volver es como antes, mandando y que nadie me diga lo que tengo que hacer. Yo estoy en los sitios porque me quieran de verdad y no porque me metan con calzador”.

Rubiales: “Sigo manteniendo relación con Rubiales, hemos hablado después de la sentencia. No me gustó lo que hizo en el palco, pero para tener amigos perfectos mejor no tenerlos. Él no está orgulloso por ejemplo del momento del palco, pero es que todos los días no se es campeón del mundo y después de que 15 jugadoras renuncien y de apostar por Vilda. Cuando Rubiales dijo que no dimitía le dije que no le apoyaba. Yo no me levanté a aplaudir como se levantaron otras personas que luego recularon. Rubiales es el mejor presidente que ha tenido la Federación en la historia. ¿Si quiere volver a ser presidente? Sí, yo creo que sí. No creo que los presidentes de las territoriales le apoyaran otra vez. Dentro de lo malo Louzán es el mejor”.

Candidatos a seleccionador: “Tenía en mi cabeza a Zidane, pero no lo sabía ni Rubiales. Él gestionó un vestuario con gente que no era fácil. Pero no llegué a hablar con Zidane de esto, igual que nunca dudé de De la Fuente. ¿Guardiola? Si Zidane es complicado, imagínate Guardiola. Él, con todas las declaraciones que ha hecho respecto a temas políticos, no creo que fuera seleccionador español”.

Opción de que volviera Ramos: “Ninguna. Y perdí la amistad con él por eso. No supo diferenciar. El día de la llamada Ramos dejó de hablarme, no supo diferenciar. Para mí es el mejor central de la historia. Cuando hablamos con él no se lo esperaba. Yo sí me esperaba que pudiera reaccionar así, quería ser el jugador con más internacionalidades de todas las selecciones del mundo y ahí se le truncó ese sueño. ¿Si se rompió algo entre Luis Enrique y Ramos? Sí, hubo un antes y un después en Granada, se distanciaron mucho entre ellos. Y Luis Enrique es de los que si toma una decisión no escucha. Se creía que estaba bien pero pidió el cambio porque estaba lesionado y ahí se rompió todo”.

Primas: “Era duro y luego con Busquets se cerraban en cinco minutos. Soy de pensar que tienes que ganar dinero con tu club, no puedes ir a la seleccion a ganar dinero. Busquets me decía: ‘Lo que tu quieras’”.

Fichaje de Le Normand: “En el último momento le llama Deschamps pero él me da su palabra. Xabi Alonso me dijo que no me lo pensara, que era un profesional como la copa de un pino”.

Fichaje de Lamine Yamal: “No es un caso fácil. Viene el seleccionador de Marruecos expresamente y el Gobierno de Marruecos intenta convencerlo y cuando hablamos con él me dijo: ‘Yo quiero ser campeón de Europa, me están presionando de todos lados pero yo quiero jugar con España’. Esto fue antes de debutar. El padre fue más complicado, me dijo que en Marruecos lo iban a matar. Me dijo unas cosas que mejor no decir nada. Su madre es la persona en la que más se tiene que apoyar Lamine. Ella me preguntó por qué quería que fuera con España y yo le mentí, le dije que era porque estaba muy preparado y no por Marruecos”.

Huijsen: “Fuimos a Italia a convencerlo. Lo llamó Koeman para ir a la absoluta y lo convencimos. Asencio me parece un central que me llevaría a la guerra junto a Gavi, pero creo que los centrales del futuro serán Cubarsí y Huijsen”.

Brahim: “En la historia de De la Fuente es el jugador que más ha llamado. Si alguien lo conoce es él. Se decide que no se va a hacer nada diferente que se vaya a hacer con Joselu o Cucurella. Se le manda al Madrid una prelista y ahí estaba él. Lo que pasa es que él tenía prisa para saber si iba convocado. Y se entera el día de la convocatoria como cualquier otro jugador. Y decidió irse con Marruecos. Nos enteramos por un burofax que decidió irse con Marruecos. En esos tiempos a lo mejor jugaba 15 minutos, luego tres semanas sin jugar... ¿Si me ha dolido? Creo que a él le ha dolido más no levantar la Eurocopa. No es lo mismo jugar con Italia que con Kenia. Es un jugador que me encanta. ¿Hacer con él lo mismo que con Lamine? Decidí no hacerlo. A lo mejor tengo que decir que me equivoqué, el tiempo lo dirá”.

Luis Enrique tras el Mundial: “Antes de coger el vuelo para España lo tenía claro. Él dice que no y Rubiales lo apoya. Es un entrenador que entiende mucho de fútbol y en gestión de vestuario a veces tiene un temperamento complicado”.

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