La presidencia de Ronaldo en el Real Valladolid en 11 claves
El brasileño no pudo cumplir casi ninguna de sus promesas y con el paso del tiempo perdió la ilusión hasta dejar de acudir a Zorrilla.


En los próximos días, cuando el CSD dé el visto bueno, el Real Valladolid dejará de ser, oficialmente, el club de Ronaldo Nazário en una presidencia que ha ido de más a menos, a la nada. De ser aclamado y pasar temporadas en la provincia a no querer pisar por la ciudad. De estar en el día a día del club a largas ausencias, todo ello culminado con una descapitalización del club y de la plantilla evidente que ha terminado con el tercer descenso en cinco años marcando una serie de récords negativos.
Aunque se puede decir, es evidente, que el club mejoró su imagen y marca en el mundo con la presencia de Ronaldo Nazário como embajador y no se puede desdeñar la profesionalización y estabilidad del club y las mejoras en el estadio, lo cierto es que el paso del brasileño por el club tiene aroma a oportunidad perdida con once cuestiones negativas que marcaron la estancia de ‘O Fenómeno’ en el club blanquivioleta.
1- Amenaza con construir un estadio nuevo. En plena negociación con el ayuntamiento para la cesión del estadio y la firma de un nuevo convenio, David Espinar, mano derecha de Ronaldo insinuó la posibilidad de que el club construyera un estadio nuevo fuera de la ciudad en abril de 2019. Dicha declaración tuvo una contundente y sonada respuesta del entonces alcalde, Óscar Puente, quien rechazó cualquier tipo de “chantaje” y recordó que era un espacio público y, por tanto, la tasación de los técnicos era sagrada. Esta fue la primera gran polémica de Ronaldo en Valladolid.
2- Precios desorbitados y la pandemia. Una de las primeras crisis de Ronaldo Nazário en Valladolid llegó en el verano de 2019 cuando se informó de los precios de los abonos, que contenían un incremento muy importante. Fue tal la reacción de rechazo entre abonados y simpatizantes que el club tuvo que eliminar la campaña y sacar otras tarifas días después. Esta cuestión fue aplaudida por ser el club capaz de escuchar y rectificar. Peor fue la pandemia en 2020 cuestión que paró la Liga, debilitó a todo el fútbol, y al Real Valladolid, con la ausencia o escasa presencia de público en los estadios durante temporada y media.
3- Política deportiva cedida a Paulo André. Tras una pandemia y una mala temporada 20-21 que terminó con el descenso del equipo a manos de Sergio González, a quien gran parte de la afición pidió que se cesara antes, y Miguel Ángel Gómez tomó las riendas un brasileño que había aparecido meses antes por los Anexos para “aprender”. Después hizo una auditoria deportiva y, finalmente, se convirtió en jefe de fútbol hasta hoy. Curiosamente, Paulo André tenía puesto oficial, y aparecía en la web, cuando las cosas iban bien y era asesor externo cuando, no. El “guru” de Ronaldo fue un desastre y uno de los grandes culpables del fracaso del carioca en Valladolid.
4- Sustitución de Pacheta por Pezzolano. El calentón del 6-0 en el Bernabéu en la temporada 22-23 se llevó por delante a Pacheta, lo que supuso, de la mano de Paulo André, la llegada de Paulo Pezzolano, que un mes antes había dimitido en el Cruzeiro, entonces propiedad también de Ronaldo. El uruguayo llegó de una manera atropellada, consiguió buenos resultados al principio, pero terminó bajando al ganar uno de los últimos ocho partidos de Liga. La temporada siguiente pronto hubo divorcio entre la grada y el técnico al que, además, André le dio “las llaves del club” creando malestar en el club. Pese al ascenso, la paz social nunca volvió.

5- Cambio del escudo. Probablemente el inicio del fin de Ronaldo. De manera unilateral el club, sin contar con los aficionados, decidió cambiar el emblema blanquivioleta. Las protestas fueron inmediatas y no cesaron, por este tema, hasta que hubo un referéndum donde más del 85% de los abonados que participaron apostaron por el escudo que estaba en vigor desde los años 60. Si bien él era el dueño y máximo responsable en este tema, como en muchos otros, estuvo mal aconsejado.
6- Llevó mal las críticas. Ronaldo poco acostumbrado a que le lleven la contraria, llegó a decir de las personas del fondo norte que empezaron las protestas que “lo hacían por una cuestión de no haber cedido con otras exigencias” y llegó a denominarlos como “radicales”. Y es que ‘O Fenómeno’ siempre llevó fatal las críticas y cuando las preguntas en las ruedas de prensa pasaron de ser por el Madrid a las razones de los malos resultados o la propiedad se enfadó y empezó a cambiar su implicación con la entidad. Los malos resultados y estas polémicas dieron paso a las protestas en el estadio y la multiplicación geométrica en cada partido de las banderas amarillas contra Ronaldo.
7- Ausencias en el estadio. De estar por Valladolid viviendo por temporadas y en Zorrilla cada 15 días a no pisar por el estadio por el ambiente y su dejadez. Esta temporada, el carioca sólo acudió el 19 de agosto de 2024 en la primera jornada, en la conmemoración del 40 aniversario de la consecución de la Copa de la Liga. El brasileño puso distancia y apenas volvió a Valladolid en contadas ocasiones para acudir a juntas o cuestiones puntuales. No sólo eso, sino que, además, en una especie de provocación aparecía jugando al tenis, esquiando o en un gran premio de F1 mientras jugaba el equipo.
8- Mimar a los futbolistas. En la época dorada del brasileño en el Real Valladolid el exfutbolista trataba a los jugadores “como estrellas de Hollywood”, como sugería en su documental “El Presidente”. Llegó a regalar consolas y teléfonos de alta gama a los jugadores por victorias y se los llevó a Ibiza al conseguir la permanencia en su primera temporada en contraposición a lo que ha pasado esta temporada cuando ha pasado más de medio año sin estar en o con sus jugadores, en una temporada lamentable.

9- Confianza en personas equivocadas. El exCEO del club, Matt Fenaert, tuvo buenas intenciones, pero escasos aciertos en materia económicadeportiva. Eso llevó a una deuda importante en el ejercicio 22-23, con fichajes que han dañado la economía del club y las futuras plantillas, lo que conllevo una multa de LaLiga en el verano del 24 que obligó a Ronaldo a hacer una ampliación de capital. Además, el francés es señalado como una de las personas que ha llevado a una grave crisis económica al club de baloncesto. Además, otros profesionales que trabajaron para el club y tuvieron mucha influencia no estuvieron a la altura. La paciencia de Ronaldo con estas personas le perjudicó.
10- Enfrentamiento final con la anterior corporación municipal. Una de las grandes incógnitas en la estancia de Ronaldo en Valladolid se refiere a la decisión de atacar al gobierno municipal de Óscar Puente semanas antes de las elecciones municipales de 2023 y con el convenio de la ciudad deportiva listo para firmar. Ronaldo, y personas de su confianza, vieron con buenos ojos la promesa electoral de Carnero de hacer un miniBernabéu por 25 millones y, aunque pretendieron mostrarse como neutrales, apostaron por el PP. Finalmente se quedaron sin el convenio de Puente y sin el miniBernabéu de Carnero. El ahora ministro calificó la presidencia de Ronaldo como una “de las mayores decepciones de mi vida”.
11- El legado y las grandes expectativas. Ronaldo siempre dijo que no se iría hasta dejar un legado que pasaba por asentar al equipo en Primera y ampliar la ciudad deportiva. Y más allá. En mayo de 2019 afirmó en AS que el equipo podría optar a la Champions en cinco años. Al final ni Europa, ni asentamiento, ni ciudad deportiva. Sólo tres descensos en cinco años, cuestión por la que será recordado como uno de los peores presidentes de la historia del Real Valladolid.
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