Casadó, una “piraña” en La Masia
Hizo ocho faltas contra el Madrid. Fue el jugador que mejor entendió lo que pedía el partido cuando el Barça se quedó con diez; y que incluso recolocó a sus compañeros en el palco. Empieza a asentarse como stopper titular del equipo.


En el vestuario le llaman “pitbull”. También “piraña”. No es una falta de respeto, sino exactamente lo que eleva a Marc Casadó Torras (14-9-2003, Sant Pere de Vilamajor), que empezó la final de la Supercopa equivocándose en la acción que generó el 1-0 de Mbappé, y la terminó haciéndose fuerte en el centro del campo y entendiendo perfectamente lo que requería el partido cuando Gil Manzano expulsó a Szczesny. Casadó hizo ocho de las trece faltas del Barça, cortando el ritmo del Madrid y evitando que el partido cogiese atisbos de remontada.
Casadó fue el futbolista que se acercó a Hansi Flick cuando el Barça se quedó con diez jugadores. El alemán, que ya había utilizado una ventana de cambios para meter a Araújo por Iñigo, decidió meter a Dani Olmo y quitó a Lamine y Gavi. El alemán decidió defender con un 4-4-1. Fue Casadó el que les explicó a sus compañeros cómo se dispondrían en el campo. Hasta ahí llega la conexión entre el entrenador y un futbolista que, obviamente, entiende el juego.
Casadó es el último milagro de La Masia porque todos los acontecimientos que se desarrollaban alrededor de su carrera invitaban a pensar que no estaría este domingo en Arabia. La temporada pasada estuvo a punto de marcharse al Granada. Con Xavi, no tenía futuro en el Barça. El entrenador de Terrassa no le terminaba de ver condiciones para moverse en el pivote, tal vez porque pensaba en la finura que es necesaria para acelerar el juego en esa posición de ‘5′. Flick prefirió esperar. Pareció que Casadó tampoco se asentaría con el alemán, que empezó prefirieron a Marc Bernal. Pero la grave lesión del chaval le dio otra oportunidad al ‘pitbull’, que esta vez se agarró al puesto con fiereza hasta hoy. Flick le ha encontrado utilidad a Casadó, que no es un jugador distinguido técnicamente, aunque también es capaz de asistir como a Raphinha en la acción del 1-5. Pero que le da un punto de agresividad y picante necesario entre tantos artistas. Su energía, sumada a la de jugadores como Gavi y Raphinha, le da un perfil guerrero que le hace muy bien al Barça.
Lo de Casadó es inesperado, pero una confirmación que ha traspasado las vallas de la Ciutat Esportiva. Luis de la Fuente ya lo ha hecho debutar en la Selección, y, si mantiene este nivel, tiene toda la pinta de volver a aparecer en la lista el próximo mes de marzo para medirse a Holanda en los cuartos de final de la Nations League. Renovado hasta 2028, con una cláusula de 100 millones de euros, su valor de mercado ha crecido 27,5 millones de euros en sólo seis meses. En junio, Transfermarkt fijaba su valor en 2,5 millones. En diciembre, ya estaba en 30 millones. El Gattuso de La Masia está de moda.
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