De Borja hasta Puado
El delantero perico debutó en Balaídos en agosto de 2018, un día en el que Borja Iglesias tuvo que soportar una sonora pitada por parte del público.


EI 18 de agosto de 2018 será una fecha que siempre recordarán Borja Iglesias y Javi Puado, protagonistas en aquella calurosa tarde de verano en Balaídos por diferentes motivos. El santiagués era el fichaje estrella del Espanyol, la gran apuesta perica del mercado estival. El cuadro barcelonés se rascó el bolsillo para apoquinar los 10 millones que figuraban en su cláusula de rescisión después de haber marcado casi 60 goles en dos temporadas (34 con el Celta B y 23 con el Zaragoza). En Vigo querían retenerlo, pero la competencia era dura con Iago Aspas y Maxi Gómez, así que Borja prefirió hacer las maletas (sigue el partido en directo en as.noticiasalagoanas.com).
Caprichos del destino, el santiagués empezó su nueva etapa en su antiguo estadio. Balaídos no le perdonó la espantada, aquella tarde le dedicó una sonora pitada que todavía resuena. El tiempo todo lo cura y esos silbidos fueron desapareciendo. Sin embargo, este verano cuando sonó su nombre para regresar, algunos todavía se mostraban escépticos y prometían rencor. Hasta que Borja Iglesias entró por A Madroa conduciendo su Seat Panda y se echó a llorar al recibir por sorpresa la visita de su abuela, feliz de ver a su nieto vestido de celeste.
Si aquel 18 de agosto se le atragantó a Borja, para Puado fue la felicidad más absoluta. El delantero barcelonés consiguió debutar en Primera a sus 20 años con el equipo de sus amores, poniendo así la primera piedra del referente espanyolista que es hoy. Esta tarde ambos se fundirán en un gran abrazo y seguro que recordarán aquella calurosa tarde de verano que marcó sus vidas.
Aquel 18 de agosto ninguno de los dos consiguió marcar gol. Borja está siendo feliz en Balaídos, aunque de momento solo ha conseguido celebrar un gol con su gente (ante el Valladolid en septiembre). Por su parte, Puado todavía tiene pendiente hacer gol en Vigo. El duelo al gol está servido esta tarde a orillas del Lagares. La temporada del barcelonés está siendo fantástica y hoy intentará dar continuidad a su brillante campaña para dejar la permanencia encarrilada. El santiagués acepta el reto para llevar al Celta de regreso a Europa. Como hizo con el Espanyol en 2019.
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