Famalicão y Gil Vicente, a por el goleador del filial del Celta
Los números de Jordi Escobar, máximo artillero del Fortuna, atraen a dos equipos de la primera división de Portugal.
El Celta Fortuna ha resurgido y se ha metido de lleno en la pelea por el playoff a LaLiga Hypermotion. Una temporada más, varios jugadores del filial celeste están llamando a la puerta del primer equipo y también despiertan el interés en clubs de superiores categorías. Uno de ellos es el killer de la plantilla que entrena Fredi Álvarez. Al ariete Jordi Escobar lo pretenden dos conjuntos de la primera división de Portugal.
El Famalicão, séptimo clasificado, y el Gil Vicente, decimocuarto, han puesto sus ojos en el punta barcelonés de 23 años. Los directores deportivos de la Primeira Liga portuguesa siempre están atentos a este perfil de futbolistas en Primera Federación, sirva como ejemplo reciente el caso de Roberto Fernández -ahora cedido por el Braga en el Espanyol-. Los números de Jordi Escobar no pasan desapercibidos y menos para dos equipos de localidades que se encuentran a menos de una hora en coche de Vigo.
El delantero centro con pasado en los filiales del Valencia, Almería, Barcelona y Betis está cuajando su mejor temporada en la categoría de bronce del fútbol español. Suma once goles en 28 partidos, una eficacia realizadora similar a la de Alfon González la pasada campaña. A su cifra de dianas hay que añadir cuatro asistencias.
A pesar de haber estado de baja seis semana por lesión, las cifras de Escobar no iten comparación dentro de la plantilla. Él solo lleva los mismos goles que el resto de los delanteros juntos. Con sus tantos y sus pases decisivos ha aportado 21 puntos al equipo, sin esa contribución el Celta Fortuna estaría en descenso y no a 4 puntos de la zona de playoff cuando restan tres jornadas para la conclusión del campeonato.
El futuro del ariete internacional con España en categoría juvenil se resolverá en las próximas semanas. La dirección de fútbol céltica encabezada por Marco Garcés debe tomar una decisión que probablemente se retrase hasta que se sepa si el filial disputa o no la fase de ascenso a Segunda División. El salto de categoría con el Fortuna abriría una nueva vía, que se sumaría a otras como la posibilidad de intentar ganarse un puesto en la primera plantilla durante la pretemporada. Todo ello, con clubs a la expectativa al otro lado del río Miño.
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