San Mamés vibra con la final
El estadio bilbaíno, abarrotado con 50.000 aficionados, disfruta del Tottenham-United.
San Mamés vive una jornada vibrante, abarrotado con casi 50.000 aficionados para la final inglesa de la Europa League entre el Tottenham Hotspur y el Manchester United después de unas horas eminentemente festivas y sin incidentes graves en Bilbao. Se han registrado algunas peleas sin importancia y siete detenciones de seguidores británicos camino del estadio, por peleas y agresiones, pero la Ertzaintza ha tenido la situación bajo control en todo momento. También se han quemado dos contenedores. Por lo visto hasta el momento, los seguidores spurs han ganado en presencia y ruido a los mancunianos. Casi todos han visto el partido de pie.
Desde tres horas antes del inicio del partido han ido accediendo los aficionados de ambos equipos a la zona perimetrada y protegida por un amplio dispositivo de seguridad, donde eran orientados por las decenas de voluntarios y colaboradores que han trabajado durante los últimos días en torno al evento.
Los hinchas ingleses se han repartido a lo largo del día en las dos zonas de aficionados instaladas para cada una de las aficiones: en el Parque Etxebarria los manunianos y en Ametzola los ‘spurs’. El espacio común ha estado situado en El Arenal. También se han hecho sentir los latidos europeos por el Casco Viejo y en las zonas de ambiente de la capital vizcaína, principalmente la popular calle Pozas.
Leyendas del United como Rooney, Scholes, Ferdinand, Berbatov, Ferguson, que visitó el Museo Athletic en San Mamés, y el propietario Jim Ratcliffe no faltaron a la cita. Tampoco los exjugadores del Tottenham Sandro, Gareth Bale, Glenn Hoddle y Fernando Llorente. El sueño de estos era que el United no se convirtiera en el cuarto campeón invicto de esta competición en la era de la Europa League, tras el Chelsea (2018-19), el Villarreal (202021) y el Eintracht de Frankfurt (2021-22). Y se cumplió. Tampoco se lo quiso perder la mayor referencia que hay en Bilbao: Iribar.
Mientras, los principales puntos y arterias de la ciudad se han teñido del rojo del United, del blanco y azul del Tottenham y también del rojiblanco del Athletic, cuya camiseta han lucido con orgullo decenas de aficionados locales en un día en el que muchos soñaron con ver al equipo de Ernesto Valverde peleando por el trofeo.
La cita reunió en Bilbao a algunas de las personalidades más importantes del fútbol en el planeta. Uno de los rostros conocidos es Nasser Al Khelaifi, presidente del PSG. El catarí llegó ayer a Bizkaia para participar en el comité ejecutivo de la UEFA, que se celebra en la ciudad. Es miembro del mismo, como presidente de la Asociación Europea de Clubes (ECA). Causó enorme revuelo, al presentarse por la tarde en el Club Jolaseta de Getxo para jugar a pádel. Los niños de hockey alucinaban e incluso se fotografiaron con el mandatario, quien acudió a la final en La Catedral. Este año tiene la opción de anotarse la ansiada Champions, ya que juegan la final ante el Inter. El sábado su equipo juega ante el Reims la final de la Copa de Francia.
¡Un Tottenham de Champions!
En una jornada con una agradable temperatura en torno a 20 grados, que acabó cargada de nubes e incluso dejando algo de lluvia, en el interior de San Mamés la temperatura ambiental ha subiendo a medida que se acercaba la hora en la que el alemán Zwayer pite el arranque del encuentro.
La definitiva cuenta atrás comenzará a diez minutos del inicio, cuando Aduriz, embajador de la UEFA para esta final y leyenda del Athletic, entregue el trofeo antes de la ceremonia oficial de unos cuatro minutos de duración en la que participarán 160 actores.
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