El Barça siempre tiene a Emil Nielsen

El Barça salió ileso en su viaje a Hungría donde le esperaba el Pick Szeged, venido arriba por sus éxitos antes los grandes equipos de Europa en el último mes, y una pista en la que el campeón español ya había visitado esta temporada y sólo empató en el último ataque del partido. Esta vez, sin embargo, después de sufrir en la segunda parte, dio la vuelta al marcador para ganar por tres tantos: 24-27 (10-9).

No fue un partido brillante. más bien todo lo contrario: áspero en la pista y plúmbeo para el espectador neutral. El Barça renunció al contragolpe, una seña de identidad de no hace mucho, y casi se deja el partido desde los siete metros: falló los tres primeros penaltis (dos Gómez y uno Wanne; por fortuna, Richardson marcó los dos últimos.

Si el Pick Szeged hubiese ganado, a su portero, el sueco Thulin, le hubiesen sacado a hombros del Pabellón, pero en la recta final, tras ganar por tres goles, surgió a figura de Emil Nielsen para echar el candado y empujar las acciones ofensivas de Dika Mem y Luis Frade, otros dos seguros de vida de este Barça, que coloca un pie, por lo menos, en la Final Four de Colonia, aunque antes, el próximo jueves, deberá ratificarlo en el Palau.