España, sin piscinas al aire libre, salta a un Europeo en el que no tendrá techo
“No hay ninguna apta para preparar esta competición”, destaca a AS Domenico Rinaldi, director técnico, ante el reto en Antalya y tras brillar en Belgrado 2024 también en piscina exterior.
Con reformas que van para largo -aunque por fases- en el Centro de Natación Mundial 86, ha tenido el equipo español de saltos que tomar el puente aéreo, de Madrid a Barcelona, y ultimar en el CAR de Sant Cugat su preparación para el Europeo que discurrirá del 22 al 28 de este mes en Antalya (Turquía). Siete saltadores que viajan este domingo y que se situaron a sí mismos altísimo el listón, pues el año pasado en Belgrado (Serbia) se hicieron con el segundo puesto en el medallero, con tres oros y tres platas.
Era obligado, en el ‘media day’ organizado este martes, preguntarle al director técnico de España, Domenico Rinaldi, sobre si este cambio de instalaciones, de ciudad, afecta a la Selección. “No, la suerte de hecho es que tenemos el CAR y todas las facilidades que nos dan, que son muchas”, afirma a AS el que fuera saltador olímpico con Italia. Pero añade: “Lo que afecta es que el campeonato de Europa es en piscina descubierta, porque no tenemos ninguna en España apta para preparar un Europeo”.
Pueden ser las condiciones del Gloria Sports Arena, al aire libre, determinantes para los resultados, según Rinaldi, si bien precisamente en Belgrado 2024 la competición también se desarrolló en exteriores, concretamente en el Serbian Institute For Sports And Sports Medicine, y en fechas relativamente similares, a mediados de junio. Aquella situación en el calendario, a apenas un mes para los Juegos Olímpicos de París, también pudo alterar los resultados.
Con todas las primeras figuras salvo Rusia
Lo confirma Rinaldi, quien estima que este Europeo “será un poco más fuerte y duro porque el año pasado Italia y Gran Bretaña presentaron su segundo equipo, y ahora estarán las primeras figuras de todos los países, salvo de Rusia, que sí estará en los Mundiales”, los cuales se celebran dentro de dos meses en Singapur.
Otro factor a tener en cuenta tanto en el Europeo como en los Mundiales es que España no llega en su momento más óptimo, “porque estamos preparando saltos nuevos, pero es que era obligatorio hacerlo en el primer año del nuevo ciclo. Con eso vamos”, se encoge de hombros el director técnico. Y también cambian los nombres propios, ya que Nicolás García Boissier se ha retirado y Adrián Abadía, su pareja en saltos sincronizados con la que fueron bronce en Doha 2024 y sextos en París 2024, se ha tomado un año sabático.
“Sustituir a dos medallistas mundiales, a diplomas olímpicos no es fácil, porque estamos intentando construir un equipo pero les quitamos el faro”, concluye Rinaldi, quien cree a pies juntillas en esa idea de grupo por encima de todas las cosas.
Dos olímpicas y un nuevo ‘abanderado’
Y para ello contará con un nuevo abanderado, pues a sus 24 años es ya el más veterano de la expedición: Carlos Camacho, que en el Europeo del año pasado se colgó dos oros y una plata. Y también con dos olímpicas: una Valeria Antolino que fue doble campeona de Europa y que se llevó el diploma olímpico en trampolín de tres metros, y que ahora regresa a la plataforma, y Ana Carvajal, oro y plata en Belgrado 2024 y con las ideas muy claras a sus 18 años.
Completan el equipo Juan Pablo Cortés (plata en el último Europeo en trampolín sincronizado), Max Liñán (cuarto de Europa Belgrado 2024 en plataforma sincronizada), Jorge Rodríguez (sexto este año en la Superfinal de la Copa del Mundo de Xi’an en plataforma) y Rodrigo Cardona, nacido en 2007 y octavo en la Copa del Mundo de Guadalajara (México) esta temporada, en plataforma sincronizada.
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