Que el Pichichi de LaLiga no haya marcado ni un gol de cabeza demuestra que los hábitos de los centrodelanteros de toda la vida ya no parecen imprescindibles.

PorCarlos Marañón

“En el Madrid la exigencia siempre es máxima y ser segundos nunca satisface. Es obligado intentar ganar cada partido y cada campeonato, por eso es comprensible el enfado de los madridistas...”

PorManuel Cobo

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