¿Por qué no siempre este Atlético?
El equipo de Simeone goleó al Betis. Mostró buen juego e intensidad, todo lo que no ofrece a domicilio. Julián Alvarez hizo un doblete; marcó Correa, jaleado; Griezmann tuvo buenos minutos y Witsel pudo despedirse de los suyos jugando.


Espectáculo. Es una pena que el Atlético se comporte en casa de una manera y fuera de su estadio de otra. No sé si reirme o llorar. El equipo de Simeone se fue 2-0 al descanso, pero pudo haberse marchado con una goleada de escándalo. Cierto es que el Betis puso en liza un once en el que no estaban muchos de sus titulares, pero el Atlético le metió al encuentro una intensidad que no muestra fuera del Metropolitano. Hizo el primer gol y buscó el segundo. Falló tantos cantados, pero jugó al fútbol, tocó la pelota, creó espacios... Lo que deben hacer jugadores del nivel que tienen los del Atlético. Nada que ver con los desastres ante Leganés, Getafe, Las Palmas, Osasuna...
Golazo. Es cierto que a ello contribuyó el tempranero gol de Julián Alvarez: 17 tantos ya en LaLiga. Un golazo de libre directo, de esos que hace mucho tiempo que no se ven en el equipo rojiblanco. Yo me acordé de mi querido Pantic, especialista en este tipo de acciones. Y bien que lo festejaron los 62.269 espectadores que se dieron cita en el estadio rojiblanco. Yo esperaba un recibimiento algo hostil al equipo, pero la afición tiene ganas de pasárselo bien, de disfrutar... Volviendo al futbolista argentino, ha marcado 29 goles esta temporada, lo que no está nada mal. La ‘Araña’, que hizo un segundo tanto tras una maravilla asistencia (regalo) de Griezmann, ha sido una de las noticias positivas del conjunto madrileño en esta campaña.
Despedidas. El Cholo no se anduvo con historias y puso al once que considera titular. Tuvo minutos Correa y veremos lo que pasa con él. Marcó un tanto y la afición coreó su nombre. La hinchada le adora. Y pudo despedirse jugando Witsel, quien lo dio todo cada vez que jugó. El susto lo protagonizó un aficionado al que tuvieron que atender y fue evacuado del estadio. Ojalá que el percance no vaya a mayores. Y desearle al Betis toda la buena suerte del mundo en la final de la Conference League. Ojalá que se lleve el trofeo.
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