Alcaraz vence a Cerúndolo para regresar a su hábitat

Tan solo tres hombres en la historia han sido capaces de alcanzar, como mínimo, cuatro semifinales en Indian Wells de forma consecutiva: Rafa Nadal (entre 2006 y 2013), Novak Djokovic (de 2011 a 2016) y, desde esta pasada madrugada, Carlos Alcaraz. El murciano, de tan solo 21 años y tercero del ranking mundial, es desde 2022 un fijo en la penúltima ronda de un torneo en el que suma ya 16 victorias consecutivas después de superar un partido de supervivencia frente al argentino Francisco Cerúndolo (6-3 y 7-6 (4) en 1h43). Carlitos está de vuelta en su hábitat natural y corta así una notable sequía, ya que no disputaba unas semifinales de Masters 1.000 desde, precisamente, Indian Wells del año pasado. Serán las novenas de su carrera en la categoría de oro de la ATP, y el sábado luchará por una plaza en la que sería su tercera final seguida frente al británico Jack Draper, que llega lanzado después de vencer a Ben Shelton (6-4 y 7-5 en 1h41).

La racha de 16 triunfos consecutivos supone la tercera mejor de la historia del evento californiano, tan solo por detrás de las 19 que atesoró Djokovic (2014-2017) y las 18 de Roger Federer (2004-2007). Precisamente, el serbio y el suizo son los únicos que han ganado tres títulos seguidos en Indian Wells, un reto que persigue Alcaraz y que tiene a tan solo dos pasos. Para seguir adelante en su carrera hacia el hat-trick, al español le tocó ponerse el mono de trabajo frente a un aguerrido Cerúndolo, de 26 años y 26º mundial. El argentino tiene un historial que demuestra que no se achanta contra los mejores (llegaba con un 13-13 frente a top-10 y 2-2 ante top-3), y no le puso las cosas nada sencillas a Carlitos, que supo sobrevivir en su encuentro más enrevesado de la presente edición, sin tanto brillo pero con solvencia.

El viento, un día más, volvió a ser protagonista, y generó una noche bastante desapacible en el Valle de Coachella, con el termómetro marcando apenas 12 grados cuando comenzaba el partido. El día era frío y eso se le pegó a Alcaraz, que tuvo un inicio repleto de dudas, bastante incómodo ante las condiciones. El español jugó con fuego y le brindó seis oportunidades de break a Cerúndolo en sus tres primeros turnos de saque, pero el bonaerense desaprovechó todas ellas. Y, claro, cuando dejas con vida a alguien de la talla de Carlitos, lo acabas pagando caro. Tras unas largas conversaciones con su equipo, el murciano ajustó, se reencontró con un juego sin errores no forzados (14 en el primer set, tantos como en todo el duelo ante Dimitrov) y, mucho más a gusto desde el lado en el que tenía el viento en contra, abrochó un break que fulminó la primera manga.

“Él ha jugado muy buen tenis hoy, las condiciones eran más complicadas que ayer, con más viento y frío. Fue realmente difícil para mí empezar el partido, él tuvo muchas oportunidades en el primer set, yo pude salvarlas y aprovechar la que tuve. Estoy muy feliz por todo lo que he hecho hoy, era un día para sobrevivir, para intentar tener buen ritmo en el partido y aprovechar las oportunidades que me daba. Estoy orgulloso por todo lo que he hecho hoy”, analizó Alcaraz tras su victoria, consciente de que lo que tocaba era bajarse al barro y salir con vida de un encuentro trampa. “El tenis va de ganar, no importa cómo lo hagas. No pienso en jugar un gran tenis en cada partido, en encuentros así, en días así, tienes que avanzar con el nivel que haya. Va de tener un buen comportamiento, fortaleza mental, estando ahí con buen ritmo. Por ejemplo, no he pegado a la bola tan limpia como ayer, pero he hecho lo que tenía que hacer. Creo que de eso va el tenis”, continuó.

“Seguimos”, le advertía desde su box Juan Carlos Ferrero, y es que Cerúndolo seguía apretando de lo lindo. El argentino, que buscaba las segundas semifinales de Masters 1.000 de su vida, tiene un tenis muy correcto en casi todas las facetas, sin estridencias y haciendo bien todo lo fundamental. Siguió poniendo en apuros a Alcaraz y, a la novena bola de break que tuvo, logró romper el servicio del español, la segunda vez que le sucedía en los cuatro partidos que lleva en esta edición. Francisco llegó a colocarse con 4-1 y amenazó con llevar el duelo al tercer set, pero la reacción de Alcaraz llegó a tiempo. Su rival dependió excesivamente de los primeros saques (78% de acierto), y es que, cuando no los conectaba, sufría y mucho con sus segundos (31% de puntos ganados). Así cimentó Carlitos un quiebre que le permitió igualar el segundo set, el cual se acabó decidiendo en un tie-break en el que a Cerúndolo le pudieron los nervios. Sigue sin ceder el tetracampeón de Grand Slams un solo set en lo que va de edición, y ha ganado 32 de los últimos 34 que ha disputado en el torneo.

“Draper es muy peligroso”

A pesar de su juventud, Alcaraz ha hecho costumbre el verle en las rondas finales de cada torneo que disputa, aunque últimamente le estaba costando más de la cuenta en Masters 1.000. Tras ganar Indian Wells hace un año, el de El Palmar nunca había superado la barrera de unos cuartos de final que eran su techo desde entonces y en los que encadenaba tres derrotas (en Miami, Madrid y Shanghái). Al alcanzar sus novenas semifinales de Masters 1.000 (su balance hasta ahora es de 6-2) desempata con Álex Corretja y Albert Costa, y es junto con Sergi Bruguera el quinto español con más apariciones en esta ronda de la historia. En el desierto de California, cayó en las semifinales de 2022 frente a Rafa Nadal, mientras que las dos últimas las superó ganando a Jannik Sinner.

Su siguiente parada será, el sábado, Jack Draper, de 23 años y 14º mundial. El británico, una de las grandes promesas del tenis, ha estado lastrado en el pasado por su físico (sin ir más lejos, se retiró en Australia durante su partido ante Alcaraz por una lesión de cadera), pero cuando se encuentra bien resulta muy peligroso. Lo está demostrando en California, donde ha encadenado victorias frente a Taylor Fritz y Ben Shelton para plantarse en las primeras semifinales de Masters 1.000 de su vida, y un triunfo sobre Carlitos le haría entrar al top-10 por primera vez en su carrera. “Es muy peligroso, tiene un nivel muy alto y está en buena forma. Es uno de los jugadores más complicados del circuito ahora mismo. Tiene ritmo desde el fondo, grandes golpes, así que tengo estar preparado y centrado. A ver si las condiciones son un poco mejores. Estoy con ganas de enfrentarme a él porque la última vez se tuvo que retirar por lesión”, comentó un Alcaraz que domina el cara a cara entre ambos por 3-1. El de El Palmar, que firmó la cámara preguntándose si debería comprarse una casa en Indian Wells, está de vuelta en su hábitat, y a dos pasos del ansiado hat-trick de títulos.

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