Djokovic rompe en tierra
El serbio, que persigue el título 100, consigue su primera victoria sobre arcilla, después de caer en Montecarlo y Madrid y renunciar a Roma. Mañana, ante Arnaldi.
Novak Djokovic, con el colmillo romo este año, se apuntó al ATP 250 de Ginebra para llegar a Roland Garros con más rodaje sobre tierra, superficie en la que no había ganado ni un partido. Y lo comenzó derrotando a Martin Fucsovic (33 años, 134º) por 6-2 y 6-3 en 1h:17. El serbio perdió en su debut en Montecarlo frente a Alejandro Tabilo, en Madrid contra Matteo Arnaldi (que será ahora su rival en cuartos, mañana, 18:00, Tennis TV). Luego renunció a Roma y en el coqueto club suizo persigue un título 100 que se le resiste.
El choque frente al húngaro, un rival que no demostró mucho peligro, sirvió para estrenar banquillo. Tras romper con Andy Murray, el campeón de 24 grandes ha recurrido a Dusan Vemic, extenista de 49 años que ejerce de capitán en la Billie Jean King Cup y ya colaboró hace años con el serbio, y que tendrá como apoyo a Boris Bosnjakovic.
Djokovic logró dos breaks, sin necesidad de apretar el acelerador, en el primer set con un 76% de puntos ganados con primeros servicios y 100% con segundos. En el segundo, el de Belgrado tuvo que ser atendido por lo que parecían ampollas en su pie derecho, pero no sufrió para llevarse el parcial, sin ceder ni una sola bola de rotura en todo el partido.
Arropado por sus padres y por su esposa, un Djokovic que lucha contra el tiempo, cumplirá mañana 38 años sobre la pista. “Es bueno romper el hielo en tierra. Es una superficie totalmente diferente y te ayuda el tener un gran servicio”, resumió.
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