Jugaban Alcaraz y Fils, pero quien hizo historia fue Alessandra
La joven, que en este Godó y el de 2024 ya había portado la sombrilla para los jugadores, se convierte en la primera recogepelotas con síndrome de down en el circuito ATP.
Ya había sido pionero el Torneo Conde de Godó al contar con ella y con Dídac como responsables de las sombrillas, tras los banquillos de los tenistas, tanto en la edición actual como en la de 2024. Pero este sábado se dio un paso más. En el transcurso de la semifinal entre Carlos Alcaraz y Arthur Fils, Alessandra Bonhomi hizo historia.
La joven, una de las personas más apreciadas estos días en el Real Club de Tenis Barcelona, se convirtió en la primera recogepelotas con síndrome de down en el circuito ATP. Y menudo partido eligió la organización para estrenarse: a lo grande. Apareció ‘Ale’, como la conocen sus allegados y cada vez más fans prendados de su naturalidad, a los 45 minutos del encuentro, en el segundo turno de los llamados ‘ballkids’ y en la posición 1, esto es, al fondo de la pista, en la esquina más próxima a la entrada, delante del palco de autoridades.
En solitario, sin asistencia, pudo ‘Ale’ repetir lo que el viernes ya había experimentado en un partido de dobles, en este caso no en la pista Rafa Nadal sino en la Andrés Gimeno. Una prueba que ya había superado con nota.
“Cuando lo propusimos, era un sueño, y hacerlo realidad es emocionante”, indicó el responsable de los ‘ballkids’ del Godó, Marc Visiedo, quien añadió: “Se trata de demostrar al mundo que cualquier persona, aunque tenga una discapacidad, puede conseguir lo que quiera en esta vida, con superación y esfuerzo”.
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