Zverev: “Vomité 37 veces y tuve 39,4 grados de fiebre por la noche, pero no es excusa”

Alexander Zverev fue el gran protagonista de la jornada de este miércoles en el Torneo de Hamburgo, su ciudad natal, y donde el alemán, que partía como primer favorito al título, dijo adiós en octavos de final tras caer en tres sets ante el francés Alexandre Muller por 6-3, 4-6 y 7-6 (5).

Un Zverev que en la rueda de prensa posterior al partido confesó que había pasado una mala noche y que, pese a ello, decidió jugar el partido, algo que pocos jugadores habrían hecho. “Aunque haya vomitado 37 veces y tuviera 39,4 grados de fiebre por la noche, no es excusa. Creo que sólo hay dos jugadores en el mundo que habrían salido a la pista hoy. Yo soy uno de ellos, y estoy orgulloso de ello”.

El tenista alemán también lamentó haberse quedado a dos puntos de ganar el partido en el tie-break decisivo del tercer set y destacó que no pudo ocultar sus problemas de salud, lo que le dio alas a Muller en cuanto se enteró. “Estuve a dos untos de ganar el partido, y eso dice mucho a mi favor. Creo que he jugado un partido muy sólido y muy bueno. Pero creo que Muller se dio cuenta en algún momento de que no me encontraba bien y por eso empezó a jugar los puntos lo más largos posibles. Fue muy listo en ese aspecto”.

Sin embargo, y pese a este tropiezo, Zverev se mantiene optimista de cara a Roland Garros, donde espera llegar ya sano para llegar lo más lejos posible. “Quizás lo único bueno de la derrota es que ahora tengo unos pocos días para controlar el dolor un poco. De cara a Roland Garros, lo primero es llegar sano y entonces veremos. Pero no cambia nada para mí en París. Quiero seguir demostrando un buen tenis y ganar muchos partidos”.

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